martes, 7 de febrero de 2012

Una carcel sin rejas

Una vez acabado mis días en Capurgana y Colombia toca ponerse en rumbo hacia Panamá. En Capurgana se toma una lancha pequeña que me lleve a Puerto Obaldía, el primer pueblo de Panamá. Menos mal que esta lancha es pequeña  y no tiene un motor potente por lo que es un viaje de placer en comparación con el de Turbo-Capurgana. Después de 5 días aun me duele el cuello, espalada, piernas y hombros.

Pero nada más llegar me doy cuenta que no es una frontera cualquiera. Primero hay que pasar por los militares que me hacen sacar todo de la mochila y revisan hasta el más pequeño hueco para buscar algo. Miraron dentro de los bolsillos de mis pantalones, debajo de las suelas de las zapatillas, entre la ropa sucia. Incluso me preguntaron uno a uno para que eran los medicamentos de mi botiquín.

Una vez pasado el trámite toca poner el sello de entrada a Panamá. Aquí son más estrictos que en cualquier lugar o frontera que haya pasado. Obligatorio tarjeta de crédito y dinero en efectivo (piden 500usd). Incluso a algún amigo le pusieron pegas…pero al final todos entramos y ya tenemos el sello, uno más para la colección.


Como ya dije, se acabó Sudamérica...al final mi viajecito ha sido un poco rocambolesco pero ya estamos en Centroamérica.
la ruta hecha en Sudamérica

Nada más llegar conozco a Marc y Leslie de Alemania y Bélgica respectivamente. Parece ser que todos tenemos la misma información de otros viajeros y parece ser que hay barcos cargueros que te llevan por un módico precio. Además son los barcos cargueros que van repartiendo la comida a las islas de San Blas por lo que las veríamos por el mismo precio.

Por lo tanto, hablamos con la oficina naval y nos dicen...viene un barco hoy o mañana. Por lo que vamos a la plaza principal y asentamos nuestro campamento. 


Las primeras horas se pasan bien, hablando, riendo y leyendo. Al llegar la noche nos dejaron acampar en los banquillos del campo de fútbol...perfecto así no hay que pagar alojamiento.

Nuestra mansión

Al día siguiente viendo que no llegó ningún barco vamos a hablar con el de la oficina naval y nos dice..creo que hoy no llega, si no es hoy por la tarde es mañana. Bueno, vamos a pasear por el pueblo para matar el tiempo.


Y empiezan los problemas. Los militares empiezan a restringirnos todo. No podemos ir a la playa. Está prohibido por motivos de seguridad. Tienen la caseta en la playa y no te dejan pasar. Pero si nos puedes ver, solo son 10m hasta la playa.... No, prohibido!


Esperando en la plaza principal se pasa otro día ya que el barco no llegó.


A la mañana siguiente, otra vez la misma respuesta...hoy o mañana. Empezamos a notar que la gente en este pueblo vive un poco amargada. La gente no sonríe, no te mira bien. Es un pueblo un poco extraño. Y así pasamos otro día.

Por lo menos tenemos suerte que descubrimos un riachuelo que si podemos pasar o que por lo menos los militares no nos ven. Allí podemos darnos una ducha ya que en nuestra suit presindencial no hay duchas :)

ducha hidromasaje

Al siguiente día, que os creéis que nos dijeron...hoy o mañana. Y además no nos dicen nada. Así que empezamos a investigar por nuestra cuenta. Conseguimos el teléfono del puerto de Colón y nos dice que el día anterior salió un barco y que llegará en un par de días. Bueno, sabemos que viene uno por lo menos. También conseguimos el nombre de los dos barcos panameños que hacen el recorrido repartiendo la comida entre Colon y Puerto Obaldía. Son el Gomera y el Rya del Mar. Llamamos al Rya del Mar (capitán Sierra telf 60206699 o 60420332 y nos dice que salió justo el día anterior que llegamos y que no volvía en un tiempo. Y así, pasamos otro día en este pueblo.


Al día siguiente la misma historia: hoy o mañana. Ya notamos que se nos están riendo o algo. Pero como sabemos que tiene que llegar el barco no pasa nada. Conseguimos unos anzuelos, nos fabricamos unas cañas de pescar y nos fuimos haber si hay suerte.



Después de pescar un pez pequeño y viendo que no es suficiente para los tres, el pez al agua.

La verdad que el pueblo es una pequeña cárcel. Suerte que conocí a unos niños que al final venían todos los días a jugar conmigo. Eran de un pueblo indígena a 2h de Puerto Obaldía.


Incluso hablamos con una señora indígena para ver si podía llevarnos, nos dijo que si y al final los militares no nos dejaron ir. Puerto Obaldía = cárcel sin rejas. Nada está permitido, la gente está triste...es uno de los sitios más extraños que he estado. Solamente los niños y Jerónima (una señora mayor que es muy simpática y que incluso nos trajo fruta de su jardín) se salvan.

Así van pasando los días. Conocemos que hay barcos que hacen la ruta Colon-Cartagena. Son los barcos "niña mayor", "el tropezón" y el "callon azul" (telf de Freddy 00573145413813).

Al final llegó el tropezón y después de 5min hablando con el capitán nos invitó a ir en su carguero. Nos dijo que por 100usd nos llevaba hasta Carti en 12 días con todas las comidas incluidas. Buen trato, lo mismo que la lancha rápida pero 12 días parando y conociendo todas las islas de San Blas.

Después de 8 días esperando parece que salimos. Vamos a por la autorización de la oficina naval y nos dicen que por ser un barco colombiano no nos dejan ir. Vaya enfado!! al final explotamos... después de 8 días yendo a hablar con el...nos dice que no nos da la autorización. Consejo por si alguien lo hace....meteos de ilegal. No importa nada. 

Sinceramente creemos que todo el pueblo está presionado por los dueños de las lanchas rápidas. Incluso que la oficina naval está compinchada para que todo el mundo las tenga que coger. Incluso me amenazaron que si ellos querían yo no salia por agua de puerto Obaldía. En ese momento estuve a punto de mandar a Panamá a la mierda y volverme a Colombia...me faltó muy poco.

Pero como al final el capitán nos dijo que nos esperaba en la isla Caledonia hasta el día siguiente a mediodía y que allí nos recogía esperé y me tragué el orgullo. Así que contratamos el viaje con la lancha rápida hasta allí.

Al día siguiente la lancha que no sale, supuestamente salíamos a las 7am y no se ponen de acuerdo, el dueño de la lancha quiere mas dinero, tienen que ir a por gasolina a otro pueblo...un cachondeo. Al final salimos a las 13.30h sin ninguna esperanza de llegar a coger el barco.

Hablamos con el lanchero y como ya no está el barco...seguimos hasta Carti. Y como salimos tarde tenemos que hacer noche en una isla del archipiélago de San Blas.


Después de cenar barracuda (fibrosa pero rica) volvemos y ya que teníamos pagado hasta isla Caledonia (35usd) y vamos hasta puerto Carti (90usd) decidimos pagarle una "propinilla" al capitán para que no se lo diga a su jefe y se quede el dinero el. Al final el viaje nos salió por 60usd en vez de los 100usd del viaje.


Y mirando en la caseta antes de partir vi una langosta...mmm...que rica. Y según dicen hay muchas por aquí.


Y nos ponemos en marcha para seguir hasta Carti.


El archipiélago de San Blas son unas islas del Caribe que pertenecen a los indígenas Kuna Yala. Tienen sus propias leyes y reglas...es como un estado aparte pero pertenecen a Panamá. Lo malo es que por lo que dicen hay miles de reglas y hay miles de multas. Hay que pagar por pisar tierra, por tomar foto a un indígena, por mirar a una mujer, por besar a una mujer...y las multas son muy muy caras. Normal que tengan mucho dinero.


y por fin llegamos


Al final lo que se suponía un viaje barato para cruzar la frontera entre Colombia y Panamá me ha salido por:

Buses Cartagena-Turbo: 61.000 pesos colombianos
Lancha Turbo-Capurgana: 55.000 pesos colombianos
Estancia en Capurgana: 50.000 pesos colombianos
Lancha Capurgana-Puerto Obaldia: 25.000 pesos colombianos
Estadía Puerto Obaldía: 60 usd
Lancha Puerto Obaldia - Carti: 60 usd
Bus Carti-Panamá: 22usd

Lo que suman 191.000 pesos colombianos (78,30euros) + 142usd (108,40euros) lo que da un total de 187euros (244 usd). Al final suma lo mismo que el vuelo. Por lo que recomiendo a cualquiera que quiera cruzar la frontera que vaya en avión ya que este viaje es una tortura y no hay nada especial en el camino que merezca las angustias, malas caras, enfados, etc.

Sinceramente una de las decisiones mal tomadas en todo el viaje. Espero que al tener mala suerte signifique buena suerte en otra parte de Panamá.

1 comentario:

  1. Marina Peralta Mateo7 de febrero de 2012, 9:26

    ÁNIMO CORNAGO!!! esto son todo experiencias que luego recordarás con una sonrisa!
    un beso
    Marina

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