lunes, 31 de enero de 2011

La familia del Couchsurfing

Con mucha pena dijimos adiós al paraíso de Ancud para seguir bajando por la isla. A unas 2h al sur está Castro. Esta es una ciudad en el centro de la isla bastante agradable pero se nota que es más ciudad. Tiene más tiendas, bares, restaurantes y sobre todo tráfico.

La suerte en Castro es que encontramos couch en el único posible en toda la isla. La particularidad de este couch es que es una familia chilena compuesta por Ana María (la miembro del CS), su marido y sus 3 hijos (de 25, 21 y 16 años).

Después de mostrarnos donde estaba su casa nos fuimos a dar un paseo por Castro. La parte más bonita de Castro es una zona residencial a orillas del río.


Y la catedral de madera de Castro que se encuentra en la plaza de armas.


A la hora de cenar quedamos con Ana María que iríamos a su casa para cocinar y cenar todos juntos. Estuvimos cenando caldereta, un plato muy parecido al cocido nuestro. Y luego charlando y riendo con la familia. La verdad es que es una familia muy divertida y pasamos un buen rato.

Al día siguiente decidimos ir a hacer un poco de senderismo por el parque nacional de Chiloé. Este se encuentra en la parte más este de la isla. Así que 1.30h de bus hasta allá.


Había varios senderos de diferentes longitudes pero decidimos hacer los más cortos ya que había alguno de 8h caminando que te tienes que quedar a acampar. Así que hicimos uno que se llamaba las dunas. Se iba caminando adentrándose en la pampa hasta llegar a una playa desierta.


La playa estaba llena de conchas. Según nos comentaron antiguamente se enterraban a los difuntos cubiertos por estas conchas.


Luego estuvimos haciendo un poco el gilipollas por las dunas, escalando, tirándonos...vaya como niños.



Como las 2h de este camino se nos hicieron para poco decidimos hacer otro sendero de otra hora. La verdad que eso de caminar con la mochila me está haciendo cada vez mas fuerte. Sin problemas andamos una media de 6h al día y sin cansarnos.


Lo divertido fue a la vuelta ya que nos encontramos con Julieta (la argentina con la que compartimos host en Valdivia). Así que todo el viaje de vuelta hablando y me estuvo dando consejos de como bajar hasta el fin del mundo.

Por la noche y debido a que el día anterior cocinaron ellos, nos tocó a Ben y a mi. Por lo que estuvimos haciendo una comida mexicana para la familia (enchiladas, burritos, guacamole, etc.).

Finalmente el jueves llegó y Ben tuvo que volverse para Santiago, su novia le espera en Colombia. Cuidate hermano, me lo he pasado de puta madre. Incluso me regaló un libro que  tenía de Sudamerica que me vendrá de maravilla para saber por donde tirar.

Pero bueno, esto se sabía cuando decidimos viajar juntos. Ahora con optimismo a afrontar el resto del camino.

Y llegó el primer chaparrón. Mientras esperaba haciendo dedo al bus cayó el aguacero universal y la verdad...me calé hasta los huesos a pesar del poncho. Esperando vi que salía un bus hacia Chonchi y lo cogí solo por no mojarme. De Chonchi otro hasta Quellon que es de donde sale el ferry el viernes. Sinceramente, en Quellon, no hay nada. Calles sin asfaltar, vaya nada de nada para pasar el rato. Así que a leer el libro de rutas y mirar que tengo por delante.

El paseo marítimo de Quellon.


 

El viernes ha dar un paseo de 4 horas hasta uno de los fines de la carretera Panamericana.



Las vistas de Quellon desde el otro lado de la bahía.


Luego ha hacer tiempo para coger el ferry que me cruce a Chaitén.


Al fin, el viernes por la noche cogí el ferry para cruzar de Quellón a Chaiten.


martes, 25 de enero de 2011

El Charles Chaplin animal

Ya que nos encantó Ancud decidimos quedarnos otro día mas y disfrutar de esta ciudad. En información y turismo nos comentaron que a pocos kilómetros de la ciudad hay un sitio maravilloso que visitar....las pingüineras.

Estas están a 45min en bus de la ciudad metiéndose por el campo. La sorpresa fue al llegar, vaya vistas.




Luego a andar los 2km hasta las pingüineras. Pero otra sorpresa, si pensábamos que no podía ser mejor...nos equivocábamos. INCREÍBLE!!! es la palabra. Ni en nuestros mejores sueños nos podíamos imaginar el paraíso que teníamos ante nosotros.




Una playa super-desierta en medio de la nada. Esto es vida!! jaja Suerte que había un pequeño bar para tomar una birra y disfrutar...me encanta mi vida :P


Bueno, ya era la hora y cogimos un bote que salía hacia las pingüineras.


Estuvimos navegando un ratillo viendo algunos pingüinos.





Para los que no se hayan percatado...tenderetista con los pingüinos.


La verdad que un paseo genial, con vistas a nutrias, pingüinos, cormoranes y alguna foca. Vaya maravilla de sitio.


lunes, 24 de enero de 2011

La isla de Chiloé

Ya que nos fuimos pronto, el sábado nos despertamos a una hora prudencial y decidimos ponernos en ruta. Nuestro destino, la isla de Chiloé.



A pesar de que nuestro ultimo intento no fue bueno nos fuimos a probar ir a dedo. Todo el mundo nos dice que en el sur de Chile es mucho más fácil así que dijimos...porque no?


La verdad es que fue bastante bien, a la media hora de estar haciendo dedo un hombre mayor nos recogió. El iba hacia Osorno, una ciudad a unos 120km al sur de Valdivia (la mitad de nuestro camino). La verdad es que tuvimos suerte ya que era muy simpático. Al llegar a Osorno nos dio una vuelta rápida en coche para que conociéramos su ciudad y como era la hora de comer nos dejó en uno de sus restaurantes preferidos. Sinceramente, Osorno no tiene nada para visitar así que no recomiendo pasar o quedar en esta ciudad.

Después de la comida y viendo que tuvimos suerte decidimos intentarlo otra vez. Nos pusimos en la carretera Panamericana. La ruta Panamericana es un colectivo de carreteras que une Alaska con la Patagonia Sudamericana.


Aquí estuvimos unos 45min hasta que una familia nos recogió. Estos iban hacia Puerto Montt por lo que nos acercaba otros 110km a nuestro destino. Era una familia que venía de pasar el día en las termas con música Regaee todo el tiempo. Incluso nos dio una bolsa llena de cerezas que nos vinieron de maravilla para desayunar al día siguiente.

Al llegar y ver que era un poco tarde decidimos quedarnos en Puerto Montt a pasar la noche. Puerto Montt es la ciudad más grande de la redonda y la verdad, no tiene mucho atractivo turístico, es una ciudad industrial que tuvo un boom gracias a la cría del salmón.





El domingo continuamos hacia la isla de Chiloé. Cogimos el bus el cual, al rato nos metió en un ferry para cruzar a la isla de Chiloé y dirigirnos hacia Ancud. Ya se nota que estamos bajando ya que el tiempo está cada vez más frío y el viento es más fuerte. Pasamos de los 30-35ºC de Viña a los posibles 20-25ºC de Ancud.

A la llegada a Ancud.




Al llegar a Ancud, a buscar un hostal para dejar las mochilas y a comer. Esta vez comimos un plato típico de Chiloé, el Curanto. Básicamente es un plato que contiene mejillones, almejas, trozo de carne, longaniza, un tipo de pan, pollo y todo por unos 4000 pesos (3€ por persona).


Con la panza llena a dar un paseo por Ancud. Sinceramente, es un paraíso. Calles super-tranquilas, nada de pobreza e increíblemente bonito. Subiendo la colina hay una fortificación española para proteger posibles ataques de barcos.





Luego decidimos hacer un poco de turismo off-track o "fuera de rutas". La verdad es que es la mejor idea que tuvimos en todo el día.



Como estábamos muy cansados decidimos parar a echar una siestecilla en una playa totalmente desierta.



Luego con las pilas cargados tuvimos que hacer un poco de escalada para llegar a la zona tradicional del camino.


Al encantarnos este sitio decidimos ir al pueblo a comprar algo para cenar y una botella de vino chileno. Luego vuelta allí para cenar disfrutando del anochecer...que romántico...solo faltaron unas velas jajaja




Sin duda alguna Ancud es uno de mis sitios preferidos a partir de ahora.

Control de gastos día 17/01- 23/01: 130.290 pesos (194,14€)

Total 194,14€ -- 27.70€/día

sábado, 22 de enero de 2011

No estoy perdido, estoy descubriendo un sitio nuevo

Con esta frase Ben dejó atónito a una pareja chilena que nos estaban acompañando a encontrar un ciber. La verdad que esta idea resume un poco la diferencia entre un mochilero y un turista convencional. El mochilero siempre está intentando conocer cosas nuevas sin preocuparse de donde están y el turista normalmente se atañe al recorrido establecido.

El día comenzó un poco tarde pero la noche había acabado un poco tarde jaja. Así que después de una ducha retonificante a recorrer un poco la zona. Nos decidimos por Niebla.

Niebla es una de las entrada a la bahía en  la cual se encontraba una fortaleza española. Estrategicamente había otras dos fortalezas, en la isla Mancera y en Corral que hacían practicamente imposible la entrada de barcos no deseados.


Ya en Niebla, antes de hacer nada, nos fuimos a la feria de artesanía en la cual había muchos sitios con comida típica de Chile. Gracias a Italia de Santiago fuimos directamente a un sitio que tenía "Jaivas con queso" y pescado local.


Las jaivas son un tipo de cangrejo..así que es un tipo de torta empanada de cangrejo con queso. La verdad es que estaba muy bueno y además llena bastante. Un plato de merluza y las 12 jaivas nos salieron por cosa de 6000 pesos (9€ para los dos).

Luego, para bajar la comida nos fuimos a ver la fortaleza de Niebla.



 

Menos mal que en la fortaleza estamos protegidos...


Otra cosa bonita y que nos recomendaron es ir a visitar la isla Mancera. Así que cogimos un ferry y para allá.



El paisaje me recuerda mucho a los fiordos noruegos. Lleno de naturaleza, bosques, agua y rutas para hacer trecking. Una tarde de paseo por la naturaleza que mereció la pena y para casa.

De camino a casa nos encontramos con esta curiosa señal...y mi pregunta es...como coño puede estar el norte y sur en la misma dirección???


Por primera vez desde que llegue a Chile no acabamos bebiendo cerveza hasta  las tantas. Asi que a la cama pronto que hay que madrugar :DD